El Pleno del Senado aprobó, por unanimidad, una moción promovida por el senador socialista de Lanzarote, Marcos Hernández, que insta al Gobierno a comprometer los esfuerzos necesarios para respaldar el impulso de las administraciones autonómicas, insulares y locales para hacer realidad el proyecto de creación en Canarias de una Zona Internacional para la Cultura de Paz y los Derechos Humanos, de manera que se constituya y se introduzca en el ámbito de la UNESCO y de Naciones Unidas, así como en el Consejo de Europa, la figura de Zona Internacional para la Cultura de Paz y los Derechos Humanos.
Marcos Hernández, que como promotor de la moción ha sido también el encargado de su defensa ante el Plenario, ha comenzado su intervención reconociendo que tras su iniciativa había un arduo trabajo. Al respecto, advirtió que “esta propuesta no nace por generación espontánea sino del compromiso cívico y responsable de muchas personas que desde el principio han estado implicadas en el asunto”. Hernández, explicó que la medida se basa en la Ley de Fomento de la Educación y la Cultura de la Paz, “respaldada por todos los grupos de la Cámara la Legislatura pasada”, y una norma que establece diferentes medidas destinadas al ámbito educativo y de la investigación, al objeto de establecer la cultura de paz y no-violencia en nuestra sociedad.
El senadorseñaló que en el seno del desarrollo de la citada Ley surgió la idea de convertir a Lanzarote en la primera experiencia de Zona Internacional para la Cultura de Paz y los Derechos Humanos. “Con esta moción queremos que Lanzarote, que Canarias, se convierta en el centro internacional de referencia para la Cultura de la Paz, que funcione bajo el asesoramiento de organismos internacionales, gubernamentales y no gubernamentales, y donde los ministros de Asuntos Exteriores de los distintos países y los premios Nobel de la Paz tengan un lugar de encuentro y de reflexión, un espacio de análisis concienzudo de lo que ocurre en el conjunto del Planeta”.
Por último, Marcos Hernández quiso destacar el trabajo de todas las personas que durante años, día a día, “han creído y fortalecido este proyecto”, momento en el que, entre otros, ha recordado al promotor, Valentín Olivero; a José Luis Asensio; a Andrés Rodríguez; a Javier Rojo, Presidente del Senado, “que desde el primer momento apoyó la propuesta” y de manera especial y como “el gran valedor” a Federico Mayor Zaragoza, ex Director General de la Unesco, que ha mostrado su disposición a trasladar la iniciativa a la Asamblea de Naciones Unidas.