Manuel Fajardo califica de falsas las acusaciones de Ástrid Pérez sobre la enmienda presupuestaria al gasto sanitario

Manuel Fajardo califica de falsas las acusaciones de Ástrid Pérez sobre la enmienda presupuestaria al gasto sanitario

«O la presidenta del PP no sabe leer o su intención es manipular a la opinión pública y falsear la realidad» asegura el portavoz del PSOE en el Parlamento canario
 
Arrecife, 3 de diciembre de 2014.- El portavoz del PSOE en el Parlamento de Canarias, Manuel Fajardo Palarea, ha calificado de falsas las acusaciones de la presidenta del Partido Popular en Lanzarote, Ástrid Pérez, quien acusó a los socialistas de retirar una partida de 1.700.000 euros del Presupuesto para 2015 destinada a la sanidad de la isla.

«O la diputada no sabe leer una enmienda o su intención con estas declaraciones es única y exclusivamente manipular a la opinión pública y falsear la realidad, al más puro estilo del PP» aseguró el portavoz del PSOE en el Parlamento canario y firmante de la modificación presupuestaria.

Según indicó el socialista, es cierto que la enmienda recoge sendas bajas de un millón y de setecientos mil euros destinados a sustituciones y a refuerzos del personal funcionario y estatutario del Hospital Molina Orosa. «Pero si la señora Pérez hubiera seguido leyendo, habría advertido el alta por las mismas cantidades dedicado a productos farmacéuticos y otros suministros sanitarios para ese centro hospitalario», explica.

La modificación, en palabras de Fajardo Palarea, «es puramente técnica y responde a la solicitud realizada por la Gerencia de Servicios Sanitarios de la isla, tal y como recoge la propia enmienda, que la presidenta del PP, en su precipitación por criticar al grupo de Gobierno, no alcanzó a leer».

«Si efectivamente se trata de un error y no de una manipulación torticera, confío en que la señora Pérez reconozca la equivocación y pida disculpas públicas», añade.

El portavoz parlamentario recordó además a Ástrid Pérez la responsabilidad de su partido en el progresivo deterioro de los servicios públicos de salud en el país, «con recortes en personal, equipos de diagnóstico, instalaciones e investigación, que han pretendido paliarse obligando a los jubilados a pagar su medicación o a los pacientes a abonar el coste de los tratamientos hospitalarios».