Ariagona González: «La Graciosa ha llegado a recibir medio millón de visitantes en un año que, además, se concentran especialmente en los meses de verano, llegando a la cifra de 428 turistas por habitante»

La portavoz del PSOE en el Cabildo de Lanzarote, Ariagona González, ha dado a conocer que el Grupo Socialista ha registrado una moción para que el Plan Rector de Uso y Gestión del Archipiélago Chinijo (PRUG) regule el número máximo de visitantes que puede acoger diariamente el espacio.

«Este verano la isla de La Graciosa ha sido noticia en varios medios nacionales que han puesto de manifiesto el desmesurado incremento de visitantes, llegando a afirmar que “ningún lugar tiene tanta presión turística como la octava isla, vieja utopía perdida”», ha recordado González, que ha explicado que «La Graciosa ha llegado a recibir medio millón de visitantes en un año que, además, se concentran especialmente en los meses de verano, llegando a la cifra de 428 turistas por habitante».

Para el Partido Socialista, la situación de La Graciosa ha comenzado a ser percibida de manera generalizada como insostenible, «poniendo en riesgo la conservación del espacio, la calidad de vida de sus habitantes y la satisfacción de quienes la visitan».

Una vez aprobado el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) por el gobierno de Ángel Víctor Torrres en coordinación con el Cabildo de Lanzarote, toca ahora sacar adelante el PRUG y es este instrumento el que permitirá, en base a lo establecido por el PORN, dar respuesta a la situación de desbordamiento que sufre La Graciosa.

En ese sentido, González ha manifestado que el PSOE considera indispensables dos medidas. La primera, establecer un número máximo de visitantes/día que permita disminuir la presión sobre el espacio y, como se ha señalado, mejorar incluso la experiencia de dichos visitantes.

La segunda medida consistiría en establecer una cuota de corresponsabilidad con el mantenimiento del espacio mediante el abono de una tasa que, en todo caso, sería diferente para los visitantes que se alojen en la isla, al reconocer que su aportación a la economía de La Graciosa es superior a la del visitante de un día.

«No se trata de una medida radical ni ecorrevolucionaria. En este momento, Venecia, con un alcalde de centroderecha, acaba de aprobar una tasa de cinco euros a cada visitante que no pernocte en la ciudad buscando, como propone el Grupo Socialista para La Graciosa, el doble efecto de limitar el número de visitantes y de generar ingresos para la conservación de la ciudad», ha finalizado la consejera.