El presidente del Cabildo exige una opsición sumisa y amordazada que renuncie a su labor de fiscalización y control.
Carlos EspinoEl PSOE de Lanzarote nunca aceptará el chantaje que impone el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, para dar entrada a la oposición al Consejo Insular de Gobierno. Así lo ha manifestado el secretario general de los Socialistas, Carlos Espino, para quien la exigencia de una labor de oposición afónica, sumisa y complaciente es un insulto a la democracia y al electorado.
“Fiel a la estrategia con la que ha arrancado su mandato, enfocada a la ocultación de documentos y a la tergiversación de la realidad, San Ginés pretende ahora que nos mantengamos callados ante los desmanes cometidos por el grupo de Gobierno, a cambio de estar presentes en un órgano de Gobierno, al que se nos invita únicamente como convidados de piedra”, señala Espino.
A su juicio, actuaciones como ésta definen y marcan las diferencias entre un partido, el PSOE, que da participación a la oposición con afán democrático y de transparencia y otro, CC, que pone condiciones, pide peajes y exige docilidad a quien debe actuar como garante de la gestión pública eficiente y eficaz.
“Exigir que bajemos el tono de la crítica o que olvidemos que algunos de los que se sientan en el Consejo de Gobierno forman parte de partidos políticos cuestionados por sus prácticas presuntamente corruptas es pretender, nuevamente, extender cortinas de humo sobre una realidad que la sociedad de Lanzarote debe conocer”, añade el secretario de los Socialistas.
Con respecto al abandono del Pleno de investidura por parte de los consejeros del PSOE, Carlos Espino recuerda que su desarrollo ya mostró el camino de lo que vendría después, al organizarse para evitar la confrontación y el debate público: “Fue un Pleno mentiroso, tramposo y cobarde, en el que los grupos firmantes del pacto evitaron argumentar las razones de la censura y se trasladó la intervención de San Ginés al tramo de la sesión en la que no cabían las respuestas de la oposición. Y de igual forma, ahora nos conceden la gracia inaudita de asistir a los Consejos de Gobierno, pero, eso sí, con el compromiso de que nos mantengamos callados”, apunta.