- Bergaz: “El alcalde con su voto impide que el servicio de jardines llegue a la mayoría de pueblos del municipio y opta porque haya ciudadanos de primera y segunda”.
El PSOE reprocha al gobierno del nacionalista Oswaldo Betancort el “castigo” al que somete a los pueblos del municipio, al excluir a la mayoría del futuro contrato de mantenimiento y conservación de los jardines.
“Ahora entendemos que muchos vecinos se quejen de que el gobierno sólo se acuerda de ellos para cobrarles los impuestos una vez al año, al ver cómo el alcalde con su voto particular impide que el servicio de jardines llegue a todas las localidades”, señala Marcos Bergaz, portavoz socialista.
“Nos parece de justicia que los ciudadanos sean iguales en derechos, obligaciones y servicios, por eso no se entiende que Betancort rechace que Guatiza, Famara, Muñique, Tao, Los Cocoteros, Nazaret, Teseguite o La Graciosa vean mejoradas sus zonas verdes”, apunta el edil.
“Más aun cuando tenían la oportunidad perfecta, toda vez que tienen que sacar por tercera vez a concurso el nuevo contrato, al haber anulado el Tribunal de contratos de Canarias los pliegos del anterior concurso. Sin embargo, el gobierno teguiseño por no dar la razón al PSOE es capaz de castigar a la mayoría de ciudadanos y pueblos del municipio”, subrayan desde las filas socialistas.
“Y eso que han repetido hasta la saciedad que llegaría a todos los pueblos, lo que incumplen ahora, limitando el contrato únicamente a Costa Teguise, Tahiche y La Villa”, apostilla Bergaz.
“Desde luego, este flagrante incumplimiento de su palabra no puede achacarse a la falta de recursos económicos, cuando el gobierno presume de unos nuevos presupuestos ‘expansivos y generosos'; cuando lleva una década sin recuperar millones de euros por productos bancarios tóxicos; y cuando adelantó más de tres millones de euros a los bancos en plena pandemia”, continúa Bergaz.
Desde el PSOE señalan que la iniciativa fue rechazada “por el voto en contra del alcalde, tras empate en la votación entre el gobierno y la oposición, y pese a que intentábamos ayudar al gobierno a corregir su errática gestión con los jardines, pero ni con esas”, para terminar Bergaz lamenta, “que prefieran pasar el rodillo a nuestras mociones, aunque se perjudique a la mayoría de pueblos y vayan contra sus propias promesas”, finaliza Bergaz.