Considerar que la dimisión de Páez "da muestra de su valía como consejero, y a la vez, como persona", es un ejercicio de cinismo que requiere una explicación.

Inés Rojas continúa confundiendo al Cabildo con Coalición Canaria. La primera institución vuelve a emitir una nota de prensa que no responde a la mínima visión institucional que habría de exigirse a los comunicados del Gabinete de Prensa del Cabildo de Lanzarote.

En una misma nota, y desafiando el "peor imposible", Inés Rojas despide temporalmente a Marcos Páez reconociéndole su valía (cierto que no aclara cuanta y de que calidad se la reconoce) y aprovecha para presionar al vigilante agredido, reconociendo públicamente que ha dado instrucciones para que no se incorpore a su puesto de trabajo.

Inés Rojas vuelve a aceptar una "dimisión temporal", dejando patente que sólo trata de evitar que se siga hablando del caso Marcos Páez, cuando lo procedente hubiera sido cesarlo, dada la gravedad de su conducta, indigna de un representante público.

Los Socialistas advierten a Inés Rojas que no tolerarán este tipo de comportamientos, por lo que llevarán al próximo pleno de la Corporación este asunto, reservándose las acciones legales que pudieran corresponder para la persecución de este tipo de actuaciones.